Desde la barandilla de un puente de 90 metros de altura, saltaremos al vacío sujetos por tres arneses de seguridad. Tendremos que recurrir a nuestras reservas de adrenalina, pues las agotaremos. También tendremos que vencer a nuestro espíritu de supervivencia y al sentimiento de miedo, que nos dirá que no lo podemos hacer.

Por 30 € tu salto y un videomontaje grabado con tres camaras